Patrimonio nacional: Gobierno apuesta por la recuperación del legado histórico
El Gobierno, a través de la Secretaría Nacional de Cultura y la Itaipu Binacional, llevan adelante un ambicioso programa para salvar el patrimonio material del país, entre ellos iglesias que están muy deterioradas y requieren una urgente intervención.
El histórico templo Ñandejára Guasu de Piribebuy será restaurado como parte del Programa de Puesta en Valor del Patrimonio Material del Paraguay, liderado por la Secretaría Nacional de Cultura (SNC). Con el riesgo de derrumbe como una amenaza latente, los fondos necesarios para su intervención ya fueron aprobados, y el inicio de las obras está previsto para el año 2025.
Esta restauración, como salvaguarda de la identidad nacional, subraya el compromiso del país con la preservación de su legado histórico. Este esfuerzo, que abarca en total ocho sitios en su primera etapa, no solo es un rescate del pasado, sino también una inversión en el presente y el futuro cultural, social y económico.
En esta etapa serán intervenidos: 1. El Templo de Sanbuenaventura de Yaguarón. 2. El santuario Ñandejara Guasu de Piribebuy. 3. Templo de San Atanasio de Isla Umbu de Ñeembucú. 4. Estación de tren de Areguá. 5. Estación de tren de Ybytymí. 6. Estación de tren de San Salvador. 7. Casa de la cultura de San Pedro del Ycuamandyjú. 8. La recova de Asunción.
Cada templo, estación de tren o edificio histórico representa mucho más que una estructura física: son testigos silenciosos de los eventos, tradiciones y creencias que forjaron la identidad paraguaya. Lugares como el templo de San Buenaventura de Yaguarón, con su imponente arquitectura, o la emblemática Recova de Asunción, epicentro del comercio en tiempos pasados, encapsulan momentos de la historia nacional que merecen ser protegidos y valorados.
Estos espacios no solo conectan a los paraguayos con su pasado, sino que también sirven como herramientas educativas, recordando a las nuevas generaciones las raíces culturales y los desafíos que enfrentaron sus antecesores.
La restauración patrimonial también tiene un impacto tangible en las comunidades locales. En primer lugar, genera empleos, tanto en el proceso de rehabilitación como en el turismo que atrae una vez recuperados los sitios. Cada obra de restauración involucra a arquitectos, historiadores, artesanos y trabajadores locales, fomentando la economía local y fortaleciendo las habilidades técnicas en la preservación cultural.
Además, los sitios restaurados tienden a convertirse en polos turísticos, atrayendo visitantes nacionales e internacionales. Esto dinamiza sectores como la hotelería, la gastronomía y el transporte, beneficiando directamente a las comunidades circundantes. Por ejemplo, el templo de Yaguarón y la estación de tren de Areguá ya son destinos reconocidos, y su recuperación aumentará significativamente su atractivo.
El riesgo de colapso de estructuras como el santuario de Piribebuy subraya la urgencia de estas intervenciones. Estos lugares, que fueron testigos de la fe, la resistencia y la vida cotidiana de los paraguayos durante años, podrían perderse sin acciones concretas.
Cada templo, estación y edificio restaurado es un testimonio de que la historia y el progreso pueden coexistir, inspirando a las generaciones futuras a valorar y proteger el rico legado cultural de Paraguay.